Terminó el confinamiento, nos adentramos en el verano y ¡vualá! Nos damos cuenta de lo descuidadas que tenemos una de las partes más importantes de nuestro cuerpo, las piernas.
Durante los meses que hemos estado en casa, seguramente las hayamos abandonado un poco. Es posible que hayas estado haciendo alguna tabla de ejercicios para fortalecerlas o igual no, pero sin lugar a duda este periodo de parón ha dejado señales en nuestras extremidades más queridas.
3 problemas en las piernas tras el confinamiento
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Lesiones musculares
Empezando desde dentro hacia afuera, la falta de movilidad en el tren inferior, hace que los músculos se acorten. Al estar sentados, tumbados o si movilidad, los músculos se hacen más pequeños y menos elásticos. Se ha llegado constatar que incluso pueden reducirse un par de dedos de longitud. Esto es la causa de la cantidad de lesiones con la que se encuentran los fisioterapeutas en estos días.
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Retención de líquidos
Este es uno de los factores que determinan el aumento de peso. En hinchazón que se da en los tejidos blandos suele ser además de una cuestión estética, un problema doloroso. Si nos encontramos mal por dentro eso se termina transmitiendo al exterior y puede hacer que no nos sintamos animadas para retomar de nuevo nuestras vidas. Esta acumulación de líquido sobretodo en piernas, tobillos, manos o abdomen, es sin duda algo que nos incomoda y nos hace que no podamos radiar felicidad.
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Vello
El desánimo que hemos sentido en nuestro interior estos meses, queda traducido en una desilusión hacia nosotros mismos. Las noticias nos desmotivan a diario y parecía que la situación no tuviera fin. De hecho, es posible que sigamos luchando con nosotros mismos entre la tristeza y la incertidumbre ¿Crees que no es normal descuidar el vello de tus piernas?
Volver a encontrar nuestro yo en cada paso
Es el momento de ver la vida con optimismo, estando seguros de nosotros mismos, aceptando la situación y siendo consciente de que juntos podemos con todo. Si cada uno de nosotros toma confianza en uno mismo y se levanta cada mañana con ganas de ser feliz, estaremos por el camino correcto.
Para llegar hasta aquí te proponemos una serie de recomendaciones para aliviar esos inconvenientes generados en tus piernas durante la cuarentena:
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Tratamiento anticelulítico
Reafirmar la piel de tu cuerpo, es más que algo estético una necesidad. La conocidísima “piel de naranja” es posible prevenirla y eliminarla con el tratamiento estético adecuado. Lucir unas preciosas piernas todos los días del año hará que tu vuelta a la “nueva realidad” sea con pie firme, apostando por la vida.
Tras un estudio previo, definimos la aparatología que vamos a utilizar según las necesidades propias de tu piel en el tratamiento anticelulítico en Alicante como Mesoterapia con Alidya, Láser de diodo, Láser Lipolítico, Dermo Vacuum con radiofrecuencia, Radiofrecuencia Multipolar Led, Cavitación o Presoterapia.
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Tratamiento piernas cansadas
Hacer que vuelva a correr por tus piernas el sistema intravenoso a una velocidad de infarto, es volver a darte un suspiro de esperanza para aliviar el dolor que supone tener unas piernas varicosas y cansadas. Teniendo en cuanta la aparatología mencionada anteriormente junto con masajes específicos, conseguimos activar tu circulación y que tus piernas luzcan ligeras y bonitas todo el año. Con nuestro tratamiento para piernas cansadas, queremos darte esa sensación de viveza en tus piernas y hacerte sentir la vida con plenitud para poder vivir el verano en todo su esplendor.
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Depilación definitiva
Vivir con una piel sin vello para siempre es posible tanto para hombres como para mujeres. La depilación con láser de diodo como vimos en un post anterior, es conseguir despreocuparte de este aspecto durante toda la vida. Eficacia, seguridad y 0 riesgos hacen que esta forma de depilación sea la solución definitiva al vello de todo el cuerpo tanto de las piernas como del resto. Como el tratamiento también se puede hacer en verano, ahora es el momento de que puedas retomar la “nueva realidad” sin preocuparte del vello.
Esperamos haber abierto una ventana de esperanza ante la situación vivida la pasada primavera y volver a retomar esta nueva vida con confianza y plenitud. Disfrutar de nosotros mismos es nuestra decisión, por lo que sentirnos cómodos con nuestro cuerpo nos ayudará a radiar felicidad todos los días del año.
Débora Alcaina
